¿Qué haces cuando no encuentras lo que quieres en el mercado? Crearlo
Eso fue lo que hicieron los chicos de FOOGA, al darse cuenta de que no encontraban las zapatillas que les gustaría llevar. Decidieron embarcarse en un maravilloso proyecto, cuyo resultado fue la creación de una marca propia. Todas sus zapatillas se fabrican en España siguiendo una receta cuyos ingredientes fundamentales son el cuidado por conseguir un producto de calidad y el amor por su trabajo.
Para seguir evolucionando, decidieron que era el momento de ponerse en contacto con nosotros. Y lo cierto es que no dudamos en embarcarnos con ellos en una nueva aventura: el desarrollo de un plan de Innovación Social.
Queríamos conseguir un par de objetivos principales. En primer lugar, continuar creciendo e incrementando la notoriedad de FOOGA para hacerse un hueco en el mercado. Y en segundo lugar, y no por ello menos importante, marcar la diferencia al incorporar una serie de valores que la competencia no contempla.
Diseñando la estrategia, nos centramos en 4 áreas de actuación: la sostenibilidad del producto, el impacto positivo generado por su compra, aspectos que contribuyeran a la mejora y consecución de objetivos y la comunicación.
Partíamos de una referencia exterior: los hábitos de consumo responsables eran una tendencia en otros países de Europa y EEUU. Teníamos una serie de marcas como modelo, un ideal que en España no tenía apenas presencia, con muy pocas marcas poniéndolo en práctica y apostando por ello.
Así que decidimos seguir las tendencias exteriores, y que cada compra tuviera un impacto positivo en la sociedad, que ambos conceptos estuvieran unidos y que el resultado fuera la asociación de uno con el otro. Todos queremos un mundo mejor.
Como primera medida, decidimos que se destinarían 5€ de cada par de FOOGA vendidas a una causa que el cliente mismo eligiera. La principal unión que se estableció fue con Kind Surf, ONG de carácter social y medioambiental, que ayuda a personas en situaciones desfavorecidas mediante la práctica del Surf y la educación medioambiental.
Por otro lado, observamos que sus productos no se obtenían de forma sostenible, aunque cabe destacar que son “Made in Spain”. De momento, es un aspecto que no se puede cambiar ya que la realidad no lo permite, pero que tampoco se va a descuidar. Pero sí podemos apostar por el hecho de que se fabriquen en España, por el empleo del mínimo packaging posible y por prolongar lo máximo posible la vida de nuestras zapatillas FOOGA.
Además, se trataron otros aspectos, como que la energía de las oficinas sea 100% renovable en origen, la incorporación de una carpeta en Facebook con consejos de conservación y cómo dar una segunda vida a nuestras FOOGA.
Ser parte de “Fashion Revolution”, fue también un paso muy importante. Esta ONG busca cambiar las reglas a través del poder que tiene la moda, partiendo del punto de que las prendas y los complementos que nos ponemos cada día, han recorrido un largo camino y han dejado un rastro oscuro en materia social y medioambiental antes de llegar a nuestras manos.
En cuanto a la comunicación de FOOGA, se desarrolló principalmente a través del canal online, creando para ellos un estilo comunicativo para sus publicaciones en redes sociales, Facebook e Instagram: ideas clave a comunicar y la necesidad de ser coherentes entre lo que predican y sus actos.
Adicionalmente, se añadieron una serie de marcas como referencia en términos de sostenibilidad y la contribución a la sociedad, tanto de zapatillas como de otros productos. Por último, se incluyeron blogs de moda sostenible y otros que nos llevan a abrir la mente y ver el mundo desde otra perspectiva.
Aunque FOOGA lleva poquito tiempo en el mercado, ha pisado fuerte desde el principio y seguirá haciéndolo, dejando grandes huellas tras sus pasos.
